• Breve recorrido por la literatura española.
• Literatura española en E. Primaria.
• Actividades ludo-didácticas
Es indispensable explicar de inicio la Ley del Péndulo.
La única forma de entender la historia, es a partir del mundo de las ideas subyacentes a una época; por ello, es importante conocer la forma de vida y pensamientos de la sociedad instaurada en cada uno de los diferentes momentos de la historia pasada, e incluso de nuestra historia presente. Los europeos somos pendulares vamos de un extremo a otro sin tener en cuenta los “grises”. Por todo esto, a partir de esta Ley, pretenderemos llegar a comprender los ideales de cada una de las épocas:
Ø EDAD MEDIA. siglo IX / España X-XI.
Pilares de la edad media: sociedad feudal y el pensamiento teocéntrico. Por ello, su pensamiento es Platónico.
Las características sociales y culturales de la edad media son: La Pirámide social de la edad media: Rey, nobleza… artesana, campesina… la Iglesia era otro concepto al de hoy. Sociedad estamental. Todo era para el castillo, murallas… Los Juglares y trovadores (historias de los caballeros y nobles. “El Cid”. Literatura heroica hasta el siglo XV. Se exagera la historia y sus héroes).
La lirica culta de la edad media refleja la sociedad feudal. El folclore, es un poco distinto de esto pero no se despega del todo (las cantigas galaico-portuguesas). El juglar se alejaba de este pensamiento.
Pensamiento teocéntrico: Dios me ha dado mis características imagen, escritura… por ello, hay mucho texto anónimo. Poco a poco va cambiando el anonimato y en los siglos XIV y XV se firman los textos. Son temas como la muerte (Jorge Manrique), la muerte es lo importante porque es lo que nos hace iguales y volvemos a estar con Dios. En arquitectura la catedral y la iglesia primero románica y luego gótica.
Se inicia en España en el siglo X-XI, acabará en el siglo XV con la llegada del Renacimiento. Es un movimiento cultural platónico en el que no hay tantas normas y se deja más camino hacia la libertad.
Dos pilares son los que constituyen los ideales más importantes de la edad Media:
1. Sociedad Feudal: en esta época nos encontramos con una sociedad clasista donde la nobleza (ya fueran laicos o religiosos) se encuentra en la cima. Sólo interesarán los temas relacionados con las glorias y honores de los reyes y nobles, que dan lugar a una serie de poesías en lengua romance castellano, una poesía épica en lenguaje popular; en la que se cantaban las hazañas de los héroes de esa época, batallas y conquistas de estos personajes heroicos… que eran cantadas por juglares y trovadores. Es el inicio del Mester de juglaría y los Cantares de Gesta, que hacían referencia a la literatura épica (los caballeros querían agradar al rey), y a la literatura lírica (donde vasallos y señores son reflejo de la sociedad feudal).
Los poemas recitados por los juglares ensalzaban los valores humanos, ponían en relieve la figura del héroe, buen señor y mejor vasallo, todo con gran sentido del honor y de la justicia.
Estos poemas recibieron el nombre de Cantar de Gesta, y debemos recordar en este ámbito el cantar del Mío Cid Campeador (obra en poesía épica medieval en romance castellano, más antigua que se conserva), a través de este trabajo podemos adentrarnos a los niños en la sociedad de la época, y estudiar no solo la literatura del momento sino también, otros temas como las costumbres de la época.
2. Pensamiento teocéntrico: Interpretaba que Dios era el centro de todo, por lo que muchos textos y diferentes obras en otros campos artísticos, eran anónimos. Al mismo tiempo del mester de Juglaría, en la Edad Media Española, apareció una actividad poética religiosa, que se llamó “Mester de Clerecía”, pues eran representaciones realizadas por: clérigos y gente de gran cultura.
Dentro del Medievo Español, dio inicio el Teatro Medieval, en el que unas obras eran de carácter religioso y otras, de carácter profano. Las representaciones religiosas eran denominadas autos, se elegían trataban temas y pasajes de la Biblia y se escenificaban en templos, portales o atrios. Las leyendas también son literatura de esta época.
Como autor reconocido de la edad media, nombraremos a Jorge Manrique: la obra más conocida y que más ha trascendido, son las “Coplas por la Muerte de su Padre” escritas en 1476.
Ø RENACIMIENTO (España alrededor del siglo XVI).
La mentalidad del Renacimiento es una mentalidad humanista, que se caracteriza por una vuelta al mundo grecolatino, en el que se busca una nueva escala de valores basada en el individuo. Manda en todo momento el antropocentrismo: el hombre es el centro del universo capaz de dominar el mundo e incluso su propio destino. El nuevo ideal de hombre es el “perfecto caballero”, armoniza en su interior un hábil poeta a la vez que un hábil guerrero. Además surge un nuevo ideal de belleza, donde se describe el mundo como debería ser y no como realmente es, se idealiza la naturaleza, el amor y sobre todo a la mujer.
El renacimiento, se diferencia del resto de épocas por su nuevo estamento social, la “burguesía” clase media y culturalmente altas (guerreros que leen tienen una cultura). Poder cultural de la época. Por ejemplo: Garcilaso de la vega era soldado, sabía castellano e italiano.
La lírica no escrita aspecto a destacar en esta época, transmitía el romancero (con autores como Juan de Mena o el Marqués de Santillana), además de la lírica cortesana de raíz trovadoresca recogida en cancioneros, el más famoso fue el de Hernando de Acuña.
Otros autores imprescindibles de nombrar serán Juan Boscán y Garcilaso de la Vega, que manejan una misma concepción del amor que honran en todo momento al enamorado.
Como características de esta lírica, debemos nombrar:
o Aconsejaban el disfrute de la vida antes de llegar a la vejez mediante la expresión “Carpe Diem” cuya traducción sería “atrapa el día”.
o El “Descriptio puellae” era la descripción de la belleza ideal de la mujer.
o Se alababa la vida en el campo (“Beatus Ille”), frente a la vida de la ciudad.
o El “Locus amoneus” era la descripción de una naturaleza perfecta e idílica.
o Había un gusto por lo sencillo frente a la desmesurada riqueza (“Aurea mediocritas”)
El Renacimiento es un momento en el que se aplica una división entre lo natural y lo sobrenatural. Se desarrollan y manifiestan de gran manera estos sentimientos, a casusa de la Contrarreforma (lucha contra la Reforma protestante, en la que se empeñaron la Iglesia y la Corona españolas). La literatura religiosa puede manifestarse en escritos en prosa sobre materias espirituales o bien en poemas cargados de espiritualidad. Podemos destacar obras como por ejemplo: “Noche oscura del alma” o “Cántico espiritual”, ambas de San Juan de la Cruz. Y para finalizar con esta epoca; en el siglo XVI, se cultivaron diferentes géneros narrativos que convivieron con los libros de caballería y que tienen en común, la evasión de la realidad, estamos hablando de la novela sentimental, la pastoril, la morisca y la bizantina, pero frente a todos ellos, destaca la novela picaresca, que pretende reflejar la sociedad tal y como se estaba viviendo en ese momento. Hemos de destacar “El Lazarillo de Tormes”, como la obra más representativa. Otras novelas de interés serán “El Buscón” de Quevedo y “Rinconete y Cortadillo” de Cervantes.
Ø BARROCO.
El barroco es de contrastes (oscuro con claros). Veremos y destacaremos el Conceptismo y culteranismo. La siguiente Frase de Quevedo nos aclara en que consiste el barroco : “estamos naciendo y estamos muriendo”. Lope de Vega es alegría comparándolo con Quevedo.
El siglo XVII y el auge de las premisas barrocas coincidieron en España con un brillante período literario denominado el “Siglo de Oro”. El pensamiento racionalista tuvo en el siglo XVII algunas de sus figuras más destacadas: Descartes, Leibniz... Todos ellos defendieron que la razón es la principal fuente de conocimiento humano. De este modo sentaron las bases del racionalismo. En España, la influencia del racionalismo apenas se dejó sentir. En su lugar, se registra una actitud de escepticismo hacia la naturaleza humana, escepticismo que conduce a una visión pesimista del mundo radicalmente opuesta al optimismo renacentista. Un ejemplo de esta actitud lo encontramos en Baltasar Gracián, para quien las únicas armas de que se dispone para combatir el estado de crisis y ruina de la sociedad son el individualismo y la desconfianza hacia los demás.
Podemos decir que el barroco es una época de contrastes como definimos anteriormente, ya que conceptismo y culteranismo, se encuentran enfrentados. Además, la religiosidad vivida en la época, era una religiosidad falsa que también se vio reflejada en la literatura del momento. Poemas a cualquier cosa.
El personaje típico del Barroco, tenía muchas amantes, y posteriormente se metió a cura. Se enamoró salió de cura y se casó con ella.
También en el barroco debemos hablar de TEATRO; los “ciegos” (personas que contaban grandes historias. La historia que contaban era acompañada de dibujos, podríamos denominarlo como “el primer cine” de la historia. Dentro del teatro, debemos nombrar autores como Lope de Vega con su obra “Fuenteovejuna”, o Pedro Calderón de la Barca con “El alcalde de Zalamea” entre otros. Tanto la obra de Lope de Vega como la de Calderón de la Barca, son factibles de ser leídas en clase, pues a través de ellas podemos descubrir un contenido social y reivindicativo, y la rebelión del pueblo, unido ante la tiranía y la injusticia expuestas crudamente a finales del siglo XV principios del XVI.
En cuanto a la literatura española barroca, hemos de destacar a Góngora en la obra poética, con obras como” Fábula de Polifemo y Galatea” o “Soledades”. En la prosa narrativa destacará Miguel de Cervantes Saavedra, que creó el prototipo a partir del cual nacería la novela moderna, y del que no solo debemos recordar “EL Quijote”, sino también “Novelas Ejemplares” y “Los trabajos de Persiles y Segismunda”.
Ø NEOCLASICISMO.
Época racionalista y puramente objetiva. Es un retorno a los clásicos grecolatinos; ese es el origen de la palabra Neoclasicismo.
El Neoclasicismo da preferencia a la razón frente a los sentimientos, se deja un poco en el olvido la lírica. Se rechaza lo imaginativo y lo fantástico, ya que no se escribía para entretener y no para soñador, sino para educar.
La literatura neoclásica tiene un marcado carácter crítico, didáctico y moralizador, de ahí que se cultivase la fábula con el objetivo de ofrecer al lector, consejos y enseñanzas que denominaremos moralejas, y que solían estar puestas en boca de animales. Podemos destacar conocidos fabulistas como Iriarte y Samaniego, y fábulas tan conocidas como “El burro flautista”, o “La cigarra y la hormiga”, que sin duda podemos llevar hasta las bibliotecas de nuestras aulas con el fin de mostrar a los niños qué son las moralejas y como eran escritas durante el neoclasicismo, y con qué pueden asemejarse de lo que conocen en nuestros días.
En cuanto al teatro, es dirigido por las normas del clasicismo, de este modo adopta la regla de las tres unidades que Lope de Vega había creado y por tanto, había roto en el Barroco. Los temas imaginativos y fantásticos, así como lo trágico y lo cómico. Surge un teatro exclusivamente didáctico. Podemos destacar la obra de “El sí de las niñas”, una de las obras más leídas y recomendadas en nuestras escuelas.
Ø ROMANTICISMO.
El siglo XIX la literatura en España no puedo desmarcarse de los movimientos políticos y sociales que se sucedieron durante este periodo.se necesita tanto el uno (la literatura) de l otro movimientos tanto políticos como sociales).
La literatura romántica fue creada para expresarlos sentimientos y vivencias del escritor romántico.
Las características más importantes de esta época de la literatura son:
o Rebelión del individuo contra cualquier norma que la impida expresar sus propios sentimientos.
o Absoluta libertad en política, moral y arte.
o Mantienen una actitud idealista que no corresponde a la realidad que los rodea y los lleva a la rebeldía contra la patria, la sociedad e incluso contra Dios.
o Como consecuencia del enfrentamiento entre su espíritu idealista y la cruda realidad, se produce la desesperación y el desengaño.
o Si en el siglo anterior la verdad era igual a belleza, para el Romanticismo sólo la belleza es la verdad.
o El autor romántico da preferencia a la melancolía y la desesperación, y la lírica será su género preferido, con temas tales como: la naturaleza, lo popular o el amor. Otro de los temas más representativos es la libertad, ya que sentían una fuerte admiración y expectación por todos esos personajes que están fuera de la ley (piratas, bandoleros, vagabundos), eran considerados representantes de la libertad. De ahí que sea tan famosa “La canción del pirata” de José Espronceda tanto en el ámbito de la escuela como en sus exteriores y por lo tanto, es un muy común a lo largo de la educación en primaria. En grados superiores de la educación en España hay otros temas representativos como por ejemplo: “Don Juan Tenorio” de José Zorrilla, “Don Álvaro o la fuerza del sino” de El Duque de Rivas.
Ø REALISMO.
En la España del siglo XIX el género literario de más transcendencia y reconocimiento fue la novela. En este género se reflejaba la expresión del auge de la clase media o burguesía que, a lo largo del tiempo se fue ganando poco a poco en la sociedad estamental, por lo tanto fue conquistando el poder político.
Los valores e inquietudes de la clase burguesa aparecen en la literatura a través del: individualismo, materialismo, deseo de ascenso social y aprecio por lo cotidiano e inmutable.
Los temas del Realismo literario son:
· Contraste entre los valores tradicionales y campesinos y los valores modernos y urbanos.
· El éxodo del campo a la ciudad y los contrastes sociales y morales que provoca.
· La lucha por el ascenso social y el éxito moral y económico.
· La condición insatisfecha de la mujer que ya posee derecho a la instrucción elemental pero no puede acceder al mundo del trabajo y a la independencia e individualismo burgueses.
Las novelas más típicas, y factibles de ser usadas en nuestro aula serán: “Fortunata y Jacinta” de Benito Pérez Galdós, y “La regenta” de Leopoldo Alas Clarín.
Ø VANGUARDIAS.
En España fundamentalmente, se da el Modernismo. Es una vuelta al romanticismo pero quitándole todo lo referente a la política y quedando solo la estética que tiene que ver con lo sensorial. Debemos citar a Rubén Darío, y su recurrente utilización de la sinestesia.
Uno de los poemas típicos de este momento sociocultural, y lleva por título “A Margarita Debayle”, lleno de sensaciones visuales:
“…Margarita está linda la mar,
y el viento,
lleva esencia sutil de azahar;
yo siento
en el alma una alondra cantar;
tu acento:
Margarita, te voy a contar…”
Otro de los pilares de este movimiento, es el “yo del autor”: egocentrismo. A destacar el soneto “Lo fatal”, de Rubén Darío, y en el que expresaba todo su mundo interior.
A pesar de que muchos textos centran a Juan Ramón Jiménez en la Generación del ’14, es modernista, y “Platero y yo” queda reservado como texto estudiado a lo largo de la educación primaria.
En conclusión, podemos decir que el modernismo es evasión, es un movimiento de gente joven. En general, podemos decir que de los estudiados, es el movimiento más apropiado para trabajar con las edades comprendidas por la educación primaria.
Ø GENERACIÓN DEL ‘98.
Para comenzar, en esta época hay pocos poetas de los que podamos hablar, puesto que se solía escribir en prosa.
Como curiosidad hemos de nombrar que, Antonio Machado siempre es colocado en esta etapa histórica, pero tan solo es colocado aquí por el contenido de sus obras, no pudiéndolo colocar por la forma o estructura de sus obras.
Los temas tratados durante esta época son: la vida cotidiana y a las preocupaciones filosóficas; como por ejemplo demuestra Unamuno en “El árbol de la ciencia”. Como pilares del momento que se está viviendo y por tanto de los temas tratados fiel reflejo de la preocupación social y personal, la naturaleza… La sobriedad no adjetiva que podemos contemplar en el arte, se extiende a todas las demás áreas que componen la vida diaria.
Prácticas llevadas a nuestra aula: La obra “Castilla” de Azorín, es uno de los ejemplos que podemos aplicar a nuestras clases de educación primaria, ya que podemos hacer ver a los niños como el autor a través de los adjetivos, nos va describiendo un paisaje.
Ø GENERACIÓN DEL ‘27.
Los autores de esta generación, eran admiradores del barroco. Es una generación de individualidades y de libertades en la expresión; podríamos llamarla como la Edad de Plata de la literatura española. Intentan encontrar la belleza a través de la imagen llegando a un estado de poesía pura.
En esta generación encontramos una libertad de estilos y una preocupación existencial que hace que cada autor gire hacía ellos mismos, hacía su propio interior; en otras palabras, tienden al egocentrismo, así veremos que Dámaso Alonso intenta el dadaísmo, Rafael Alberti gira hacia el surreaslismo, Jorge Guillén lo hace hacia el creacionismo, Pedro Salinas hace una literatura simbolista…
Poemas como “Las abarcas desiertas” de Miguel Hernández pueden ser trabajados desde edades tan tempranas como las relativas al primer ciclo de la educación primaria, pues el poema nos habla de una realidad no tan lejana para los niños de dichas edades:
“…Por el cinco de enero,
cada enero ponía
mi calzado cabrero
a la ventana fría...”
Ø POSGUERRA.
Después de la Guerra Civil, la cual hizo un gran daño al panorama literario español, España se quedo sin literatura propiamente dicha. Hay una clara ruptura con la tradición de los años 30. La dictadura del General Franco prohibió todas las renovaciones culturales que se realizaron durante todos estos años.
Podemos distinguir diferentes tipo de literatura: existencial durante los años ‘40 y ’50, social a lo largo de los años ‘50 y ‘60, y experimental entre los años ’60 y ’70.
En la literatura existencial distinguimos un narrador realista en primera persona, que describe ambientes sórdidos y cerrados. Dos son las obras características de este tiempo: “La familia de Pascual Duarte” de Camilo José Cela, y “Nada” de Carmen Laforet.
En la literatura social, podremos hablar de un narrador objetivista que habla en tercera persona, y que tiene una intención social (como propiamente indica el nombre del tipo de literatura que es). También dos obras son representativas de este momento: “El Jarama” de Rafael Sánchez Ferlosio, y “La Colmena” de Camilo José Cela.
Por último, nombraremos la etapa experimental, en la que hablaremos de una trama compleja, con argumento con poca importancia y demostrando un cierto interés por la forma y el lenguaje. Obras características son: “Tiempo de silencio” de Luis Martín-Santos, “Cinco horas con Mario” de Miguel Delibes o “Últimas tardes con teresa” de Juan Marsé.
Ø AÑOS ‘70.
El ambiente de libertad en el que comenzó a desarrollarse la cultura española tras la muerte del general Franco (20 de noviembre de 1975), permitió un mejor conocimiento de la literatura española en Europa y de la literatura occidental en España. A ello contribuyó significativamente la desaparición de la censura (lo que supuso la publicación de novelas españolas prohibidas en nuestro país y editadas en el extranjero), la recuperación de la obra de los escritores exiliados y un mayor conocimiento de la narrativa de otros países.
Aspectos más significativos de la novela española en los últimos treinta años:
- El carácter aglutinador. Acoge prácticamente todas las tendencias, modalidades, discursos, temas, experiencias y preocupaciones personales.
- La individualidad. Cada novelista elegirá la orientación que le resulte más adecuada para encontrar un estilo propio con el que expresar su mundo personal y su particular visión de la realidad.
¿Cómo lo seleccionamos y lo adaptamos para nuestros alumnos de primaria?
Al hablar de seleccionar, ya estaremos pensando en que debemos seleccionar un texto, y dentro de dicho texto, un fragmento, por lo que tendremos que tener muy en cuenta que características de todo el texto queremos resaltar, o qué aspectos querremos trabajar para así, hacer la correcta selección, pero… ¿cómo lo adaptamos?:
Adecuar un texto a una determinada edad o características, siempre implica modificar. Una adaptación es inherente de una modificación; y una modificación conlleva que debe hacerse en base a unos criterios, objetivos, características del receptor y requisitos especificados. En cuanto a tipos de adaptaciones, encontramos varias:
o Traducción: es la más ligera de las adaptaciones y se hace imprescindible para poder llegar a difundir un texto.
o Cambiar de género: por ejemplo, si hablamos de la literatura, podemos poner en verso una historia ya existente.
o Actualización lingüística: no podremos dar a nuestros alumnos de primer ciclo de primaria un texto escrito en castellano antiguo.
o Resumen: aunque no es una adaptación propiamente dicha, encontramos que muchos libros infantiles son un resumen de la versión original como puede suceder en la versión de El Quijote para niños.
o Adaptación de contenidos: por ejemplo, no contaremos a los niños las fechorías de Don Juan Tenorio con las doncellas.
o Adaptación de contenido y forma: al anterior punto, podemos añadirle la adaptación de la forma, el lenguaje utilizado por el personaje en cuestión, podemos tornarlo a un lenguaje algo cercano a los niños.
o Fragmentos + recreaciones: recurso muy utilizado en bachillerato y la ESO en el que se ponen fragmentos reales, resumidos y adaptados de una misma obra, para que el alumno pueda comprar.
Ahora bien, ¿cómo adaptamos los textos para poder llevarlos a nuestras aulas? Los niños (y cualquier persona) “no leen lo que no conocen” ya que primeramente deberán saber lo que hay para poder elegir, por tanto, les debemos acercar las lecturas para que ellos sepan que existen y puedan seleccionar.
En primer lugar, la podemos trabajar: hablando con los niños de un tema en particular; incluso podemos hacer una clase de animación a la lectura contando la trama principal del libro. También podemos seleccionar un fragmento del texto y leerlo con ellos o podemos buscar (o incluso hacer…) una adaptación de un determinado tipo de texto previamente seleccionado bajo unos criterios.
Definición de ADAPTAR: Como ya ocurrió en clase, debate entre si adaptar conlleva la pérdida de la esencia de la obra en cuestión o no; el diccionario de la RAE define el término “adaptar” como “acomodar, ajustar algo a otra cosa”, y en otra acepción más restringida, adaptar es “modificar una obra científica, literaria, musical, etc., para que pueda difundirse entre el público distinto de aquél al cual iba destinado o darle una forma diferente a la original”.
En definitiva, un texto puede ser modificado sin perder su esencia puesto que cambiamos la forma, pero no el contenido que es distinto al significado. Desde mi punto de vista, si queremos que nuestros alumnos de primaria sepan quién fue un autor y que obra pueden leer primero se les debe formar en cuanto a género se refiere.
No podemos ofrecerles un texto escrito en castellano antiguo y con palabras que a veces ni nosotros podemos comprender, así pues, debemos modificar las palabras para tornarlas a un lenguaje algo más coloquial; con esto cambiamos la forma para hacerlo llegar a un tipo de público distinto del receptor inicial. Por lo tanto, no perdemos la esencia. Perdería la esencia en el momento en que no respetásemos el argumento principal y las características que describen a cada uno de sus personajes.
Siempre esta la duda de hasta qué punto debemos llevar esa adaptación basándonos en la reescritura sin caer en la, pero una cosa queda clara: si queremos que nuestros alumnos aprendan algo útil sobre los textos que les presentamos, y queremos “que lean de verdad y conozcan la literatura con diversión”, debemos adaptarles aquellos textos que creamos puedan corresponder al momento histórico que está siendo estudiado o a la temática que queramos desarrollar en cada momento.